jueves, 17 de septiembre de 2009

Arno Burkholder: contra la historia (oficial)

Mientras reacomodo las cosas de la Nueva República de Babel, luego de una larga ausencia, me desayuno con una buena noticia: Arno Burkholder, historiador combativo y motivador de gratas controversias y apasionados desaguisados en red (y en persona), celebra hoy su cumpleaños. Y no es para menos, dada la enorme fama que tiene allende la súper carretera de las Informaciones.
Arno Burkholder de la Rosa, de formación comunicólogo, capitalino para más señas y caballero andante del Instituto Mora, llegó a los parajes de la historiografía mexicana contemporánea con una sola finalidad: deshacer mitos y demostrar otra cara de la Historia mexicana. Mientras destaza pieza por pieza el guango andamiaje de las obras de Francisco Martín Moreno, celebra los milagros de las letras mexicanas con poemas de escritores como Rosario Castellanos, Jaime Sabines, Eduardo Lizalde, entre otros. Cuando su mirada cáustica revisa los cacareados festejos bicentenarios, pondera las virtudes de un programa peculiar como Ludens de Canal 22. Y así, hasta tener un espectro bien delimitado de las cosas que sólo pueden verse a través de Clionáutica, el blog que tiene a bien dirigir desde hace buen rato.
Aunque muchos no dejan de sentir las agresiones de Burkholder en el bolsillo, digno es reconocer su mirada crítica hacia el modo de ver la Historia; claro está que la historia oficial no es diosa de su devoción, pero aún demuestra que hasta en toda la basura hecha por sectores público y privado, dedicados a su difusión, siempre hay una perla de mayor atención. Además, varios de sus lectores (presentes, pretéritos y futuros) esperamos con ansiedad su historia del legendario periódico Excélsior, hoy en día avasallado por el imperio de Vázquez Raña. (La Prensa, diario sui generis de nota roja, fue la primera víctima de aquel imperio. Ganó difusión, pero perdió su estilo. Cuestión de enfoques.)
En fin, me faltan palabras para ponderar en su justa dimensión el trabajo de Arno Burkholder en Clionáutica. Simplemente me limitaré a recomendar su oportuna visita a la página (http://clionautica.blogspot.com/) y participar con él en toda polémica que se presente.
Admirado Arno, te mando un fuerte abrazo y mis mejores deseos. ¡¡Felicidades!!

1 comentario:

Arno Burkholder de la Rosa dijo...

Don Ulises, muchas gracias por su comentario! Lamento verlo hasta ahora, pero me emociona que dediques un espacio para hablar de mi blog. No entendí muy bien eso de "las agresiones de Burkholder en el bolsillo", pero te agradezco las cariñosas palabras que me brindas. Amo la historia. La que se escribe y la que se vive. Y pienso que, como nos enseñaron los maestros, todo lo humano merece historiarse, puesto que de historia estamos hechos. Si todo sale bien este año podrás disfrutar de mi libro sobre Excélsior, mientras investigo otro diario muy famoso de nuestro país. ¡Te mando un abrazo!